

Por: equipo de Ingeniería en Servicios Inmobiliarios Sinaí
Olavarría está herida.
La gente ya no cree. Los barrios están descuidados. Las promesas, vacías. Los políticos se pelean entre ellos por poder, mientras la ciudad se apaga. 🕯️
Pero en medio de esa oscuridad, algo distinto está naciendo.
🌿 Hay personas que no gritan, pero actúan.
🛠️ Que no viven del Estado, pero sí trabajan por el bien común.
🤲 Que no buscan figurar, pero están dejando huella.
Una red silenciosa de hombres y mujeres empieza a reconstruir desde abajo.
Con ética. Con palabra. Con un sueño en común: volver a confiar.
No quieren venganza. Quieren orden. Quieren paz. Quieren ver crecer a sus hijos en una ciudad digna.
Ya no se trata solo de política. Se trata de comunidad.
Se trata de mirar al otro a los ojos y decirle: “yo también quiero algo distinto… y estoy dispuesto a construirlo con vos”.
Y eso asusta al poder viejo.
Porque no lo pueden comprar.
No lo pueden controlar.
No entienden que el amor al prójimo puede ser más fuerte que cualquier estructura podrida. 💛
El futuro de Olavarría no va a venir de una boleta electoral.
Va a venir de una red de gente buena que se anima a actuar cuando todos se resignan.
La esperanza ya empezó. No pide permiso. Y está creciendo en silencio, con fuerza y con propósito.